domingo, 24 de julio de 2011



Todo lo que buscamos está dentro nuestro


Gracias por estar siempre allí con tanta luz, con tanto amor. No hay que ser mezquino con el amor, cuanto más se ama, más amor vuelve multiplicado en nuestra propia vida. Debemos estar siempre con el corazón creciendo en gratitud. Cuando descubrimos que no había que buscar nada afuera de uno mismo, nos damos cuenta que todos los lugares donde queríamos llegar siempre estuvieron dentro nuestro.

Me gusta el ejemplo de Ganesha, el Dios de la india con cabeza de elefante. El padre y la madre lo reúnen a Él y a su hermano y le dicen: el que primero dé la vuelta al mundo, ese es el más sabio. Entonces el hermano sale corriendo para llegar primero y Ganesha da vueltas sobre sí mismo y dice: ya llegué. Los padres lo felicitan y premian. Aquel que se descubre a sí mismo ya recorrió el universo.

Pero seguimos queriendo lograr cosas afuera en lugar de vivir lo que ya tenemos, lo que ya somos, vivir ese estado de luz genuino que es lo que somos de verdad.

¿Por qué no nos atrevemos a brillar con todo nuestro potencial?
Porque todavía nos identificamos tanto con el personaje que creemos que interpretamos, que nos creemos que ese personaje es real, y nos obnubila, nos saca la visión de toda la grandeza que siempre hay en nosotros más allá de los roles en que actuamos en nuestro paso por el planeta a diario.

Una frase divina de Sai Baba dice: -“Cada vez que odies a alguien ahí afuera, ese es el espejo de lo que odias en vos, pero como no logras tener la grandeza, el coraje, ser heroico, tener la humildad de decir: -“tengo esos residuos que tengo que trabajar”, en el otro detestamos las cualidades que no podemos terminar de ver en nosotros mismo. Cada vez que amamos a otro, esa es la belleza de nuestro interior, pero cada vez que pedimos que otro nos ame es porque no nos estamos amando con la intensidad, con la grandeza, con la confianza, con la calma, de lo que somos capaces.

Somos seres de luz, nacimos para ser felices, el problema es que nunca se nos dijo eso y estamos llevando vidas bastante limitadas creyendo que éramos lo que el mundo nos decía, y ahora ya sabemos bien que no somos nunca más lo que el mundo nos ha dicho, sino todo aquello que ni siquiera intuimos todavía que somos.


Pactos Desde las Vidas Pasadas
Los pactos que arrastran aspectos de fatalidad desde las vidas pasadas se refieren a acuerdos dos o más personas, usualmente formados por grupos de personas, los cuales se han hecho bajo una gran intensidad emocional y social comprendiendo situaciones de patriotismo, guerra, amor, odio, justicia, familia, religión, honor, libertad, poder, riqueza, discriminación y muchas otras situaciones que implican algo por las que vale la pena luchar y morir, las que van más allá del tiempo y condiciones de la vida pasada donde se hicieron esos acuerdos.

Estos pactos pueden ser acordados en esta y en la otra dimensión a través de nuestra serie de vidas pasadas y no están limitados a situaciones altruistas, no egoistas, ni con una gran intensidad emocional y social ni sólo a aquellos por lo que vale la pena luchar y morir. Algunos pactos, los que traspasan los límites de una vida pasada, sí suelen compartir esas características haciendo que la mente y espíritu de las personas proyecten su destino en base a una situación en juego imaginaria a la cual hay que responder sin importar su costo. La fatalidad puede ser favorecida por los pactos debido a que la direccion de nuestra vida debe seguir la pauta implicada en los pactos y debe guardar consecuencia con la lealtad hacia las otras personas involucradas.

No todos esos pactos favorecen la fatalidad negando así nuestra libertad para escoger nuestro propio destino porque de alguna manera éstos pueden disolverse gracias a nuestro desarrollo espiritual. Pero, por ejemplo, los que que se basan en sentimientos negativos, como la venganza, por lo general lo hacen y se llevan a cabo hasta una extensión que niega esa libertad por completo a pesar de la futilidad que resulta en nuestra vida presente y futuras. Por ejemplo, durante una guerra en sus vidas pasadas usted cae prisionero junto a sus amigos y sufren tortura, humillacion y hambre bajo la custodia de un sargento quien les da ese trato a pesar de saber que ya estan condenados a muerte por la corte marcial. Despues de morir, todos los prisioneros se juntan en su forma de almas y acuerdan buscar la venganza contra ese sargento. Este pacto de venganza hace que todo el grupo se reencarne en el tiempo y lugares que el alma del sargento elija para nacer y vivir. Hasta el tiempo que rompa ese pacto de venganza, su vida quedara limitada a los ciclos de venganza que se repiten a lo largo de las vidas pasadas, presentes y futuras.
Juramentos de Amor en las Vidas Pasadas
Un juramento en una de las vidas pasadas hecho con una intensidad emocional extraordinaria puede proyectarse hacia las vidas siguientes pasando por la presente y hasta las vidas futuras. Esto hace que el mismo patrón de fatalidad se repita consecutivamente tras cada vida que sigue, pasadas, presente y futuras.

Mencionamos los casos de amor eterno en las vidas pasadas, entre muchos otros tipos de juramentos, lo que nos puede servir como ejemplo para ver cómo los patrones de fatalidad se proyectan a nuestra vida presente por causa de esos juramentos. El ejemplo es acerca de la fatalidad amorosa que es causada por un juramento amoroso en una vida pasada. Su aspectación fatal restringe el encuentro en el amor exclusivamente entre las personas juramentadas.

Alguien puede haber vivido un enamoramiento mutuamente intenso con otra persona en una vida pasada. Esa pareja puede haber hecho un juramento para que su amor dure para siempre excluyéndose ellos mismos de la posibilidad de encontrar el amor en otra relación. Esto puede parecer como algo muy loable si no fuera porque porque algún problema pudiera estar aparejado al juramento, y nos referimos aquí a que la pareja extendiera este juramento hacia las vidas futuras dejando el juramento sin límite en el tiempo. La consecuencia de esto es que en todas las vidas siguientes cuando están en relaciones que no son con la persona con la que se juró amor eterno, todas esas relaciones no le serán suficientemente satisfactorias, como si algo faltara en esas relaciones; esta es la manera como se manifiesta la aspectación de la fatalidad a consecuencia de un juramento de amor eterno como el explicado. Esta situación ocurrirá hasta que el juramento se quiebre y la persona pueda ser capaz de amar a otra y desarrollar una relación completa. Esta puede ser la explicación desde el punto de vista de las vidas pasadas para quienes nunca encuentran una persona con la que desarrollen una relación amorosa profunda..

ALMAS GEMELAS Y VIDAS PASADAS

Destino y Vidas Pasadas:
Cómo Se Aspecta La
Fatalidad en Su Futuro
Su destino puede cambiarlo por uno mejor al romper las ataduras provenientes de las vidas pasadas en sus formas de juramentos, pactos y juzgamientos.

El destino en una gran parte lo determinamos en el tiempo presente, el ahora, desde el cual podemos determinar nuestro futuro a nuestro favor y lograr nuestros mejores intereses. Pero, al mismo tiempo, de alguna manera, el futuro puede ser determinado de otra manera, en contra de nuestro interés debido a algún aspecto oculto dentro de nuestra mente. Estos aspectos ocultos parcialmente favorecen la fatalidad o pueden llegar a hacer que la fatalidad tenga un rol dominante en nuestro futuro. Los aspectos ocultos que juegan a favor de la fatalidad pueden provenir de alguna, algunas o varias vidas pasadas hasta que en una de nuestras reencarnaciones, incluyendo la vida presente, nos damos cuenta de su influencia negativa y rompemos esa o esas ataduras que estaban ocultas para siempre.

Los conceptos que se describen aquí no descartan la posibilidad de la fatalidad proveniente de la cría durante la infancia, desde otros desarrollos en nuestra vida social después de la infancia, de los genes heredados. De todos modos, la fatalidad causada por los juramentos, pactos y juzgamientos casi siempre tiene su base en la mente subconsciente donde se alojan todos nuestros recuerdos de las vidas pasadas y de la vida actual.

La fatalidad puede ser determinada por los juramentos, pactos y juzgamientos y eso significa que nuestro futuro esté controlado por la fatalidad debido al poder de esas situaciones que condicionan favorablemente el desenlace o dosificación de la fatalidad en nuestro futuro.

Para muchos aspectos de nuestras vidas venimos bien equipados por los genes que heredamos de nuestros padres, por su crianza apropiada y por aquellos aspectos que corresponden a las vidas pasadas. Para otros aspectos no estamos bien equipados y eso implica que la fatalidad tiene un poder mas dominante para controlar nuestro futuro en ciertas áreas específicas de nuestras vidas.

Mucha gente ha hecho juramentos durante sus vidas pasadas, para bien o para mal, y el problema es que para algunos sus juramentos han sobrepasado los límites del tiempo en que sus palabras fueron expresadas para extenderse en el resto de las vidas. Podemos mencionar los votos de pobreza, castidad, celibato, sufrimiento y pureza, los que suelen ser parte de las vidas pasadas y cuya duración está definida para el resto de una vida y no más allá. Otros juramentos pueden haber sido de amor eterno o de venganza contra otra persona o personas más allá de límite de una vida.

Un juramento hecho bajo una fuerte intencion puede proyectarse hacia las vidas siguientes sin límites para su duración. De esta manera, el mismo tipo de fatalidad se hace recurrente por una serie consecutiva de vidas pasadas. Por ejemplo, podemos vivir el juego de la venganza todo el tiempo y nunca dejar de vivirla. Todos esos juramentos de las vidas pasadas pueden convertirse en limitaciones que restringen nuestra libertad de elegir nuestro futuro por uno mejor.

En otras palabras, esos juramentos o pactos suelen hacer que la fatalidad tenga una base firme en todo momento presente haciendo así que nuestro futuro cumpla con el correspondiente patrón de fatalidad.

¿Como se puede ayudar a romper los juramentos, pactos y juzgamientos para que las personas se liberen y puedan desarrollar la vida que realmente quieren? Como psíquica puedo investigar las raíces de esos problemas actuales para que la gente se libere y consiga la felicidad y harmonia que merece.

Amores Estilo Novelas: Parejas Que Viven la Adiccion al Drama
La adicción al drama se manifiesta en muchas parejas. Su aspecto adictivo se refiere a la necesidad permanente de vivir en una intensidad emocional enfermiza en la relación.

Esta adicción suele tener aspectos ocultos que niegan la existencia del amor recíproco en la vida de una pareja.

Esta adicción comienza cuando un miembro de la pareja siente que la adrenalina desatada por los dramas le permite alcanzar intensidades y excitaciones extremas dentro de su relación.

El adicto al drama generalmente confunde algunas situaciones "excitantes" de la pareja con el amor. El tipo de relación buscada para satisfacer esta adicción puede tener desde alguno a todos los ingredientes que siguen:

repetición frecuente de conflictos intensos con gritos, alaridos, chillidos, lanzamiento de objetos, y también abuso físico y verbal
uso frecuente de mentiras y engaños, ocultamiento de la verdad
rompimientos frecuentes que alcanzan intensidades dramáticas para luego disfrutar reconciliaciones intensas y apasionadas
faltas a la confianza, engaños emocionales y físicos
espionaje mutuo
falta de o límites insuficientes de intrusión en el espacio social de ambos
la repetición frecuente del éxtasis y la desesperación en sus emociones compartidas
¿Qué sucede cuando con el otro miembro de la pareja no llegan a experimentar esos extremos emocionales que le liberan la adrenalina satisfaciendo así su adicción? El abandono de la relación ocurre porque los adictos al drama amoroso sienten que sus necesidades emocionales no encuentran eco en la otra persona; esto los hace sentirse emocionalmente solos, y que por eso deben encontrar a otra persona que sí les ayude a satisfacer su adicción a los dramas en las relaciones amorosas ya que eso les hace sentir que realmente "viven" la relación.

Este tipo de adicción no sólo ocurre en las relaciones amorosas. También ocurre en las otras relaciones: con los padres, entre hermanos y hermanas y otros miembros de la familia, con los compañeros de trabajo y socios de negocios, y aún con gente con la que se relacionan en forma casual, esporádica o sólo formalmente.

Cuando alguien siente continuamente la necesidad de crear situaciones dramáticas en su vida y en sus relaciones personales, esto a menudo se explica por la necesidad de compensación por algún conflicto emocional que les hace sentirse vacíos e infelices, tal vez aún hasta límites que bordean la depresión mental. ¿No se deberá esto a que estas personas sólo sienten que viven con todos sus sentidos cuando las situaciones desastrosas que crean hace que la adrenalina les fluya por su sangre rápidamente?

Aquellos que provienen de familias con un historial de dramas continuos, suelen desarrollar una predisposición para compartir dramas con personas con un historial familiar similar.

Una vez que una persona se da cuenta que lo que pensó como amor en realidad era adicción al drama, y que debido a eso permanece con su pareja ya que él/ella participa en el juego del drama, no por amor, entonces esa persona inicia la cura que le permitirá vivir una relacion verdadera.

La necesidad de abandonar la relación por otra mas saludable con otra pareja puede evidenciarse en esta etapa. La nueva y sana relación no tendrá la intensidad de la última y sí podrá reemplazar el drama por la honestidad y la reciprocidad sentimental que son la base de un vínculo duradero.

Podemos evitar este tipo de conflictos con nuestras parejas cuando sabemos por adelantado qué situaciones podrán ocurrir más adelante y cómo evitarlas.

Yo puedo entregarle los métodos psíquicos y la adivinación para una vida sentimental valedera con la pareja compatible; o bien, para transformar la actual relación atrapada en la adicción al drama, en una relación emocional sana, si fuera posible cambiar la fatalidad del término de la relación como única alternativa

Las almas gemelas son parte del grupo de almas que forman las conexiones karmaticas, pero se trata de dos personas que se destacan muy por sobre el resto de ese grupo en la mayoría de los aspectos de compatibilidad mutua. Su conexión usualmente proviene por haber compartido varias vidas pasadas que les han sido mutuamente positivas.
Ordene su Lectura Aquí:
La mayoría de las personas pueden tener varias almas gemelas, y mientras mayor es su tiempo de existencia, mayor es el número de almas gemelas.
Las almas gemelas pueden estar encarnadas en esta dimensión con nosotros o estar como guías nuestros en la otra dimensión, dándonos valor y ayudándonos.
Nuestras almas gemelas nos conocen bien y comparten con nosotros muchas experiencias intensas y/o que nos acercan sentimental y emocionalmente.
Lo que se experimenta al producirse el encuentro con su alma gemela, la primera vez que ocurre dicho encuentro o en un tiempo posterior, puede manifestarse con algunas emociones muy especiales como sentir una energía frenética, que su corazón deja de latir, una sensación que se transmite por toda la piel, y otras manifestaciones emocionales y físicas que manifiestan la intensidad de nuestro deseo interior de estar con esa persona para siempre.
Lo dicho recién pertenece más a la situación del amor a primera vista. La misma experiencia de encontrarse con su alma gemela puede provenir de la comunicación que hace nacer los sentimientos que crean un lazo amoroso el cual deseamos que dure por toda una vida.
El amor a primera vista puede reflejar una intensa sensación de intimidad que puede indicar que nos hemos encontrado con alguien a quien hemos amado en alguna vida pasada. La otra manera de sentir que estamos con nuestra alma gemela puede ocurrir después de haber estado con esa persona en un número de ocasiones posteriores al primer encuentro. Esto también puede manifestarse como algo repentino, como al sentir celos cuando alguien muestra interés por esa persona, o la repentina aceleración de los latidos del corazón cuando quedamos cerca de él o ella. La atadura espiritual de las almas gemelas puede emerger después de un tiermpo y usualmente causa un sentimiento como si se hubiera compartido un pasado entre esas personas lo cual implica el presentimiento de un futuro feliz como pareja. En términos de las vidas pasadas, proyectamos nuestro futuro con esa otra persona en base a una o mas experiencias compartidas en las vidas pasadas. El recuerdo de ese tiempo compartido juntos puede despertar las sensaciones asociadas en nuestra mente subconsciente al primer encuentro o después de sucesivos encuentros.
Algunas preguntas que la gente suele hacer son: "¿Alguna vez voy a encontrar mi alma gemela?", "¿Estoy con mi alma gemela ahora?", "¿Es él/ella mi alma gemela?", "Algo ocurrió, pensé que él/ella era mi alma gemela, ¿qué ocurrió?"
Posiblemente esas preguntas se relaciones con el problema común de la búsqueda de un amor incondicional e ilimitado. Esto puede reflejar la experiencia de amor por parte de ambos o uno de nuestros padres lo que para la mayoría ha sido sentido como incondicional e ilimitado. Ningún romance comparte esas características, ninguno es ni incondicional ni ilimitado.
Cuando nuestras experiencias reales no cumplen con esos estándares muchos de nosotros suponemos que no hemos encontrado la persona adecuada, y que cuando encontremos a la persona adecuada entonces quedaremos realmente conformes con la relación. Así podemos ir de relación en relación buscando algo que no existe fuera de nuestra relación materna/paterna.
El encuentro con quien hemos sentido como alma gemela nos permite la oportunidad de iniciar un romance amoroso y para hacerlo crecer hacia algo superior que signifique un lazo amoroso fuerte y duradero con niveles profundos de intimidad y pasión. Esto puede ocurrir después de un proceso de aprendizaje con un número de relaciones con otras almas pertenecientes al grupo de las conecciones kármicas, provenientes de vidas pasadas, las cuales han durado hasta sus etapas de ruptura

jueves, 21 de julio de 2011



SEÑOR DE TI MISMO

Cuando patrulles la ciudad y sientas, que es tu misión sagrada custodiarla,

cuando veles el sueño de otros, y creas en el apostolado de tu guardia,... Ver más

cuando el eco, de tus pasos en la noche, lleven tranquilidad y den confianza,

y representes la paz en cada esquina, bajo el sereno control de tu mirada.

Cuando el frio y el sol muerdan tu carne, sin que se mueva un músculo en tu cara,

cuando el miedo penetre en tus entrañas, y encuentres allí un altar de fe cristiana,

cuando tengas la humildad de los valientes, para ordenar hacer lo que más cueste,

y los hombres te sigan por ti mismo aunque vayas incluso hacia la muerte.

Cuando impongas respeto y disciplina, con tu sola presencia ante quien sea,

cuando nadie juzgue nunca tu conducta, porque no das lugar para que puedan,

y el código de honor que guíe tus actos, marque el norte vital de tu existencia.

Cuando en cada amanecer mires el cielo, agradeciendo a Dios poder decir "presente",

cuando la lista de muertos día a día, signifiquen para ti deudas pendientes,

y en el llanto de huérfanos y viudas, encuentres para luchar un aliciente.

Cuando el surco caliente de una bala rompa el espejo negro del silencio,

cuando florezca un clavel ensangrentado en el pecho de tu compañero,

y eleves al señor una plegaria, sin rencor, ni queja, ni lamento.

Cuando debas tirar y tu disparo sea sin odio y a la vez certero,

cuando aceptes morir sólo en la calle, teniendo como mortaja el firmamento,

y aspires a formar junto a los otros, que hacen guardia junto a los luceros.

Cuando seas imparcial contigo mismo, sin creerte poseedor de las verdades,

cuando puedas reprimir impulsos propios

y logres irradiar sin falsas poses, esa hombría de bien con que nace.

Cuando estés penetrado totalmente, de tu hermosa misión en esta tierra,

cuando no te encandilen los honores, ni el poder se te suba a la cabeza,

y el dinero no pueda doblegarte, ni ponerle precio a tu decencia.

Cuando eso consigas con tu esfuerzo, recién entonces habrá llegado el día,

en que puedas decir al universo:

Por gracia, a Dios... SOY POLICIA.